Denuncian esterilización forzada de mujeres que viven con VIH en México
En el marco del Día internacional de la Mujer, la organización Amnistía internacional (AI) denunció que las mujeres de América Latina que viven con VIH padecen violencia obstétrica, al ser intervenidas quirúrgicamente para ser esterilizadas sin su consentimiento.
Dicha asociación presentó un reporte titulado ”El Estado como aparato reproductor de violencia contra las mujeres», en el que expone casos de discriminación hacia las mujeres en República Dominicana, Chile, El Salvador, Perú, Paraguay, Argentina, Uruguay y México.
”En la regulación de la sexualidad y la reproducción de las mujeres es donde con más nitidez se evidencian los estereotipos, perjuicios de género y la concepción del rol que la mujer debería jugar en la sociedad, que es impuesto a todas las mujeres a través de legislaciones y prácticas frecuentemente discriminatorias», seí±ala el informe.
Amnistía indica que diversas organizaciones civiles en nuestro país, como Fondo María y Red Balance, han recolectado testimonios de mujeres que viven con VIH y que fueron esterilizadas sin su consentimiento o bien aceptaron al no saber sobre otras opciones. La organización seí±ala que la desinformación y los prejuicios sobre el virus desembocan en la esterilización forzada.
Amnistía reveló el caso de Michell, una mujer veracruzana de 23 aí±os, quien en 2014 acudió a un a hospital de la entidad para dar seguimiento a su segundo embarazo. Durante el cuarto mes de gestación le informaron que vivía con VIH.
Michell narró que en su cita con el ginecólogo, destinada a programar su cesárea, el médico le indicó que debería operarse para no tener hijos. Ella se negó y le hizo saber que prefería usar un método anticonceptivo; no obstante, el hombre insistió.
”Sentí mucha presión y vergí¼enza, pues el médico regaí±ó a mi madre. Después de diversos seí±alamientos e intimidaciones, la obligó a firmar una hoja que autorizaba la intervención, sin explicarnos de qué se trataba, ni proporcionar información sobre los riesgos que podría acarrear», declaró Michell.
De acuerdo con AI, desde que inició su parto, la mujer padeció discriminación y agresiones durante su estancia en el nosocomio. Al ingresar, retrasaron su cesárea hasta que llegara la doctora que atendía a mujeres con VIH.
El personal de salud se mostró indiferente a las solicitudes de ayuda que Michell les hizo, como asistencia para comer o ir al baí±o; asimismo, cuando tuvo una hemorragia, el personal le dio una gaza para que se atendiera la herida ella misma, con el argumento de evitar contagios.
Además, en la cabecera de su cama fue colocado un letrero que decía ”VIH». Por ello, AI indicó que fue violado el deber de confidencialidad médico y su derecho a la intimidad.
El reporte expone que el caso de Michell evidencia una práctica que además de ser discriminatoria, viola los estándares internacionales de derechos humanos, los cuales indican que las mujeres con VIH tienen los mismos derechos a acceder a métodos de anticoncepción y otros servicios de salud reproductiva.
El documento expone los casos de otras 8 mujeres en América Latina que también padecieron violencia médica y discriminación. Se presentan casos de negligencia y violencia; así como el encarcelamiento de una mujer que sufrió un aborto natural.
”Estos maltratos documentados constituyen violencia contra las mujeres practicada por agentes estatales, como lo son el personal de salud. Es violencia contra mujeres y nií±as que viene del propio aparato estatal, también llamada violencia institucional», subraya el informe.
Con información de El Diario y Proceso.