Usted se ha preguntado ¿Porqué se le llama casa de la cultura a un lugar donde se hacen exposiciones, se presentan bailes folklóricos, se imparten conferencias sobre temas importantes, sesiones de taller de manualidades, etc? O ¿Qué interés le despierta cuando escucha a alguien decir, la cultura de este pueblo es así­? Preguntas como éstas y otras relacionadas con la palabra cultura, se escuchan con frecuencia, pero seguramente más de una vez hemos tenido dificultad para encontrar una respuesta satisfactoria.
La cultura de un pueblo, sociedad, familia o persona, está relacionado con la totalidad de los bienes, servicios, instituciones, lengua, costumbres, tradiciones, formas de vida que practica, y que marcan una distancia entre la vida de cada ser humano y sus antepasados, teniendo como finalidad, proteger al hombre de la naturaleza y regular las relaciones entre las personas, de modo que mientras ésta cultura tenga más elementos,  más fortalecida se encuentra ante las causas que lo puedan destruir. Estas actividades y bienes útiles al hombre, van formando el carácter y el comportamiento de las personas con caracterí­sticas propias, con una identidad particular.  La cultura tiene entre sus fines, juntar a las personas en torno a un determinado hecho para hacer de ese suceso o momento histórico algo suyo, implica necesariamente relaciones entre un número considerable de personas, difí­cilmente se entenderí­a una cultura personal porque la cultura es compartida lo que involucra, inevitablemente a otra persona. Lo que hay que reconocer, es que nuestras acciones individuales o colectivas imponen modificaciones paulatinas a nuestra cultura.
En el vocabulario cultural se encuentran los términos; belleza, orden y limpieza por lo que cualquier intento de práctica fuera de lugar parece incompatible, sin embargo, existen prácticas sociales como la violencia, la corrupción o las pintas en las paredes que se van asentando para imponer una cultura que degrada la moral de la sociedad. Cada persona o sociedad tiene un ideal de cultura y éste se frustra cuando no lo consigue, lo que lo lleva a culparla por la miseria que sufre, buscando otros caminos para regresar a condiciones de vida más primitivas.
La cultura polí­tica se distingue por ser democrática cuando hay una participación ciudadana con transparencia en la elección de los gobernantes pero también cuando hay un modo de vida incluyente y una superación de bienestar general para todos los habitantes, dictatorial cuando lo anterior se caracteriza por ser lo contrario, aunado a la represión sistemática que sufre la población cuando exige sus derechos, acompaí±ado siempre por la supresión de las libertades. En sociedades de cultura polí­tica avanzada, la crí­tica posibilita al ciudadano para manifestar sus inconformidades y hacerse escuchar, la existencia de libertades para el arte, la libre expresión y un alto nivel de vida que se traduce en calidad para la mayorí­a de la gente.
La cultura consumista en donde los medios masivos de comunicación juegan un papel importante a través de la publicidad, es caracterizada por el predomino del mercado y sus efectos de oferta excesiva de productos, así­ como el intenso deseo de compra  de las personas sin tomar en cuenta el nivel socioeconómico, ya que en este tipo de cultura nadie escapa al extenso mar de productos en el mercado.
Podemos hablar de la  cultura de la pobreza en donde no hay la capacidad de controlar la propia vida, sino que es controlada por otros. La tradicional, donde los aspectos sobre la sexualidad, la crianza, los derechos y el poder, aún son controlados desde criterios patriarcales, en donde los de menos jerarquí­a no gozan con ciertos privilegios. La cultura posmoderna, donde abundan los celulares que dominan las actividades humanas, los canales de televisión con una oferta excesiva de programas que atrapa a nií±os y jóvenes a temprana edad, el uso del automóvil hasta para ir a comprar a la tienda de la esquina, las computadoras amigas inseparables de escuelas, alumnos y maestros, el internet con su extenso contenido que atrapa el tiempo de los usuarios, una llamada sociedad de conocimiento ávida de búsqueda de información, la moda que hace incursionar a grandes y pequeí±os en el uso de vestimenta aún fuera de su contexto social o posibilidades económicas, una juventud precoz en temas sexuales y llenos de incertidumbre sobre su futuro; en la cultura posmoderna se eliminan fronteras y hay apertura para todas las expresiones simbólicas es también parte de la evolución cultural por la que atraviesa la humanidad. La cultura del conocimiento, ilustrada y con rasgos de alto nivel de preparación, también son algunas de las formas que podemos encontrar en el amplio mundo de posibilidades de civilización.
Cualquiera que sea la forma de vida cultural que se tenga, la tarea de toda cultura, es la de preservar la unidad y la permanencia alrededor de patrones establecidos, deshacer los prejuicios que se encuentran en las conciencias de los habitantes, ya sea que estén relacionadas con las artes, respecto a la conciencia histórica o en el sentido de interpretación de las causas y efectos de la cultura que practica En cuanto a las preguntas iniciales, usted tiene la mejor respuesta.

Graciela Machuca

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